Además de dirigir este establecimiento de lujo y cuidar de la isla, North Island se compromete a proteger el medio natural y la biodiversidad del lugar.
El esfuerzo continuo de defensa del entorno natural constituye el fundamento de la filosofía de North. De acuerdo con esta perspectiva, se respetan las prácticas medioambientales que permiten obtener el objetivo fijado: proporcionar la mejor hospitalidad en un entorno sostenible y respetuoso con la naturaleza. Además de ganarse un gran prestigio como destino turístico, North Island también ha construido un santuario donde los hábitats naturales que tanto se descuidaron hasta hoy puedan reconstituirse y ser de nuevo el entorno ideal para que la fauna y flora en peligro de las Seychelles pueda volver a desarrollarse y crecer. Gracias al programa de protección del medio ambiente Noah's Ark, North Island ha pasado de ser una antigua plantación de cocoteros a convertirse en el escenario idóneo donde las especies en peligro, como el anteojitos de las Seychelles, la tortuga gigante de Aldabra y la tortuga carey, pueden volver a desarrollarse una vez más.