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Único en el mundo: Los centenarios jardines en terraza y el vía crucis que domina los alrededores.
Acurrucado en la ladera de una colina, unido al pueblo pintoresco de Mane y bañado por el sol provenzal se encuentra el Couvent des Minimes. Este convento fue primero el hogar de unas religiosas antes de convertirse en un hotel de alta categoría. El edificio, fundado en 1613, es una sabia mezcla de arquitectura medieval y de diseño contemporáneo. Las fachadas de época, los jardines centenarios en los bancales y el vía crucis con vistas a los alrededores le sumirán en la fascinación más absoluta. Las habitaciones, decoradas con suma delicadeza, dejan penetrar en ellas la tranquilidad típicamente mediterránea. El Spa L'Occitane convierte el Couvent des Minimes Hôtel & Spa en un importante lugar de plenitud y en una promesa para renovar nuestros los sentidos.
